Flores en primavera, frutas en verano y raíces inofensivas: el árbol pequeño ideal para un jardín de ensueño

Una especie que aporta color, sombra y fruta fresca, sin preocuparse por daños en el suelo, perfecto para patios, veredas o jardines pequeños.
Ciruelo en flor.
Ciruelo en flor. Foto: Instagram @turismo.gaiman

Los árboles con flores son una de las opciones más elegidas para decorar el jardín. ¿Y qué mejor si, además, da frutas? Para quienes tienen un espacio verde pequeño o buscan renovar su jardín, existe una especie perfecta con múltiples beneficios.

Lo mejor de todo: da flores en primavera, frutas en verano, sus raíces no son dañinas para el piso y no necesita grandes cuidados. Este árbol es literalmente todo lo que está bien, y su fruto es uno de los más buscados en las verdulerías durante el verano.

El árbol ideal para un jardín de ensueño

El ciruelo es un árbol pequeño, de copa amplia y esférica, con tronco de fuste recto y corteza lisa y oscura. Su follaje es caducifolio, lo que significa que pierde todas sus hojas durante una época del año, generalmente en otoño o invierno, y luego vuelve a brotarlas en la siguiente estación. Las hojas son simples, alternas, enteras, de 4 a 6 cm de longitud y de color rojo purpúreo.

Ciruelo en flor. Foto: Instagram @tallerdisenatujardin

Las flores, generalmente solitarias, son de color blanco o rosado, de pequeño tamaño (2 a 3 cm de diámetro), aunque muy abundantes; aparecen al final del invierno, antes de que broten las hojas. El fruto es una drupa carnosa, esférica, de color rojizo, que mide entre 2 y 4 cm de diámetro, tal como detalle el Gobierno de la Ciudad.

Además, en Argentina, este árbol tiene una gran importancia, ya que el país es el principal productor del hemisferio sur y uno de los mayores exportadores de ciruelas en el mundo, según la Cámara de Comercio Exterior de Cuyo.

Ciruelo en flor. Foto: Gobierno de la Ciudad.

Se puede plantar en patios, veredas o cerca de muros sin preocuparse de que sus raíces levanten el cemento, como ocurre con otros árboles. Así, se logra una decoración floral atractiva, sombra en verano y fruta fresca directamente del árbol.

¿Cómo plantar un ciruelo y qué cuidados tener?

El sitio Nevian Fertilizantes explica que el ciruelo se adapta mejor a climas templados, ya que necesita un período de frío invernal para florecer y producir frutos de calidad. Sin embargo, no tolera heladas muy intensas o prolongadas, por lo que es importante elegir bien la ubicación del árbol en el jardín.

  • Plantación: es mejor a finales del otoño o principios de la primavera. Se debe dejar suficiente espacio entre árboles para un desarrollo óptimo. Se recomienda colocar una capa de compost en el hoyo de plantación para enriquecer el suelo.
  • Riego: mantener el suelo ligeramente húmedo durante los primeros años. Durante la fructificación, se debe aumentar para evitar que los frutos se caigan antes de madurar. Por su parte, en invierno, hay que reducir el riego, ya que el árbol entra en reposo.
Ciruelo en flor. Foto: Instagram @turismo.gaiman
  • Abonado y fertilización: el árbol necesita nutrientes como nitrógeno, fósforo y potasio para un buen desarrollo. Por eso, se recomienda abonos orgánicos (compost o estiércol maduro) a finales del invierno para preparar la primavera. Durante crecimiento y fructificación, complementar con fertilizantes específicos para frutales según indicaciones.
  • Podas: durante los primeros años, se realizan podas de formación para darle estructura equilibrada. A finales del invierno, se realizan podas de mantenimiento, eliminando ramas secas, enfermas o mal ubicadas, y mejorando la circulación de aire. Por último, se recomienda una poda ligera post-cosecha para eliminar restos de fruta y ramas débiles.
Ciruelo en flor. Foto: Instagram @turismo.gaiman
  • Control de plagas y enfermedades: las plagas más comunes son los pulgones, cochinillas y polillas de la ciruela, mientras que las enfermedades frecuentes son la gomosis y hongos como monilia. Como prevención, se debe mantener el árbol aireado y aplicar tratamientos preventivos con fungicidas cuando sea necesario.
  • Cosecha: depende de la variedad, pero generalmente ocurre entre finales de primavera y verano, cuando las ciruelas alcanzan su punto óptimo de maduración.