Rainer Hermann: "Trump puso fin a la hipocresía en Israel"

Para Rainer Hermann, del Frankfurter Allgemeine Zeitung, la decisión de Donald Trump de reconocer a Jerusalén como capital israelí es honesta. Y desencadenó una dinámica cuyo resultado es imprevisible.
Rainer Hermann
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La decisión del presidente estadounidense, Donald Trump, de reconocer a Jerusalén como capital de Israel y trasladar allá la Embajada de Estados Unidos generó una polémica y diferentes opiniones al respecto. Y encendió el conflicto entre Israel y Palestina, cada vez más lejos de la Paz.

Rainer Hermann, del Frankfurter Allgemeine Zeitung, aseguró en el sitio DW que "Trump puso fin a la hipocresía. Al anunciar que pretende reconocer a Jerusalén como capital de Israel y trasladar allá la Embajada de Estados Unidos, simplemente reconoció la realidad. Sin embargo, con ello también provocó un terremoto, que afectará los intereses norteamericanos".

"En su calidad de empresario, Trump sabe que después del fracaso y la bancarrota siempre habrá un nuevo comienzo. De ahí que, como presidente, quiera destruir aquello que, a sus ojos, ha fracasado. En su opinión, el llamado proceso de paz entre Israel y los palestinos es un fracaso. ¿Por qué no intentar algo distinto? Después de todo, ninguno de los dos actores accedió a una paz con condiciones que ambos pudieran aceptar. Tanto en 2001 como en 2007 los palestinos rechazaron la devolución de un 97 por ciento de los territorios ocupados, incluido el este de Jerusalén. Querían todo o nada, y ahora se quedaron con las manos vacías", afirmó.

Protesta palestina contra Trump - Reuters
Protesta palestina contra Trump - Reuters

Y siguió: "Israel amplió consecuentemente sus asentamientos en los territorios ocupados. El gobierno del primer ministro Benjamín Netanyahu no está dispuesto a ceder. Israel lo quiere todo y, puesto que es el más fuerte, lo obtiene todo, por ejemplo una Embajada estadounidense en Jerusalén".

Hermann dijo que "Trump probablemente no está consciente de las consecuencias que su decisión puede acarrear en Medio Oriente. La política interna de Estados Unidos fue su única motivación: cumplió con una promesa que hizo a sus seguidores evangélicos y al poderoso lobby judío. No obstante, en el Medio Oriente, la decisión del presidente norteamericano ha fortalecido a Irán, que –junto a Turquía– se comportará como el defensor de los intereses islámicos".

Y finalizó: "Tras la destrucción a la Trump, nadie sabe aún cuál será el nuevo gran acuerdo para alcanzar la paz en la región. Todo apunta a que Egipto cederá una parte de la Península del Sinaí a los palestinos. Sin embargo, esto no pacificará el Medio Oriente. Quizás esa solución resulte ser un nuevo proceso de paz que haga imposible alcanzar la paz".