Cuál es el antiviral que alivia la supergripe H3N2: todo lo que hay que saber para evitar enfermarte en Navidad y Año Nuevo, según los médicos

Se confirmaron los primeros casos de la gripe K H3N2 en Argentina y marcó un nuevo foco de atención. Los detalles de este nuevo virus respiratorio y cómo combatirlo.

La confirmación de los primeros casos de la gripe K de la influenza A (H3N2) en Argentina marcó un nuevo foco de atención.
La confirmación de los primeros casos de la gripe K de la influenza A (H3N2) en Argentina marcó un nuevo foco de atención.

La confirmación de los primeros casos de la gripe K de la influenza A (H3N2) en Argentina marcó un nuevo foco de atención, cuya circulación fue registrada en el país y reforzó la vigilancia epidemiológica en un contexto de baja presencia habitual de otros virus respiratorios. El hallazgo no solo aportó información genética relevante, sino que también volvió a situar en el centro del debate el uso de un antiviral que ya se había conocido durante la pandemia de gripe A de 2009 y se supo cómo combatir esta enfermedad de acuerdo a información proporcionada por profesionales de la salud.

De acuerdo con el último Boletín Epidemiológico Nacional (BEN), “el tratamiento antiviral con oseltamivir, un inhibidor de la neuraminidasa, es una herramienta terapéutica complementaria a la vacunación, especialmente útil en pacientes con factores de riesgo”. El documento oficial resaltó que, si bien la mayor efectividad se observa cuando el fármaco se administra en las primeras 48 horas desde que aparecen los síntomas, “hay evidencia que demuestra beneficios incluso en tratamientos iniciados más tardíamente en pacientes con enfermedad grave”.

El Boletín Epidemiológico Nacional también advirtió que “el uso indiscriminado del fármaco podría llevar a la aparición de resistencia”, por lo que subrayó la importancia de promover un uso racional bajo indicaciones médicas específicas. Este enfoque busca evitar que el medicamento pierda eficacia en el futuro por el desarrollo de virus resistentes.

La variante K del virus H3N2 altera a las autoridades sanitarias en todo el mundo. Foto: REUTERS

Según los datos del boletín, diferentes estudios demostraron que en pacientes ambulatorios con alto riesgo de complicaciones el antiviral se asocia con una reducción tanto en la duración de los síntomas como en la frecuencia de complicaciones. Además, en aquellos hospitalizados con influenza grave, su uso temprano se correlaciona con una menor duración de la internación y una disminución del riesgo de mortalidad, aunque también se observan beneficios cuando se comienza el tratamiento más tarde en casos graves o progresivos.

El infectólogo Ricardo Teijeiro, del Hospital Pirovano y miembro de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI), explicó que el oseltamivir se utiliza de forma habitual en cuadros de influenza, “no es una novedad”, y advirtió sobre la importancia del diagnóstico previo y de la indicación médica antes de decidir cualquier tratamiento con este medicamento. También señaló que todos los fármacos antivirales, si se usan de manera incorrecta, pueden contribuir a la aparición de resistencia y dejar de ser eficaces.

Las vacunas contra la gripe H3N2 son gratuitas para algunos grupos vulnerables.

Más allá de la cuestión terapéutica, los especialistas recuerdan que la vacunación antigripal anual sigue siendo la principal herramienta de prevención frente a la supergripe H3N2 y otras variantes de influenza. Esta estrategia reduce el riesgo de cuadros graves, hospitalizaciones y fallecimientos, incluso cuando no impide completamente la infección. A su vez, medidas clásicas de salud pública como el lavado frecuente de manos, la ventilación de ambientes cerrados y el uso de tapabocas en convivientes con síntomas respiratorios siguen siendo recomendadas para limitar la transmisión del virus.

Vacuna antigripal PAMI 2025: cómo recibirla gratis y sin turno en farmacias habilitadas

La campaña antigripal de PAMI, lanzada en mayo, está dirigida especialmente a los grupos de riesgo, que incluyen a mayores de 65 años, embarazadas, niños de entre 6 y 24 meses, y personas menores de 65 años con enfermedades crónicas o inmunodeficiencias. En este último caso, es necesario presentar una indicación médica que certifique la condición de riesgo.

Para recibir la vacuna, no se necesita receta médica ni sacar turno. Los afiliados solo deben consultar el buscador de farmacias habilitadas en el sitio oficial de PAMI, o comunicarse con la línea gratuita 138 (opción 0), para encontrar el punto de vacunación más cercano.

Al momento de vacunarse, es obligatorio presentar el Documento Nacional de Identidad (DNI) y la credencial de afiliación vigente, ya sea en formato físico o digital. Esta campaña forma parte del compromiso de PAMI por cuidar la salud de sus afiliados y facilitar el acceso a medidas preventivas, especialmente en los meses donde las infecciones respiratorias aumentan.