Snacks saludables para los niños: los alimentos ideales para abandonar los ultraprocesados
Cada vez son más las familias que buscan opciones sencillas y nutritivas para las meriendas infantiles. Desde palitos de helado hasta barritas de granola, cuáles son las mejores alternativas.

Cada vez son más las familias que buscan una nutrición equilibrada, práctica y consciente para los más chiquitos, gracias a la información que brindan día a día los nutricionistas en sus redes sociales y en los consultorios. Por este motivo, los snacks saludables comenzaron a ocupar un lugar central en la rutina infantil.
Especialmente durante las vacaciones, cuando la falta de rutina los desordena y la energía está a pleno, los niños necesitan opciones simples, nutritivas y variadas para comer, mientras los más grandes acompañan el ritmo activo de los chicos sin recurrir a los ultraprocesados.

Lejos de ser solo “algo rápido para salir del apuro”, la colación se volvió parte de una elección más consciente dentro del hogar. Lo que antes se contemplaba con alfajores y galletitas ultra procesadas, ahora se priorizan los alimentos con ingredientes reales, etiquetas limpias y sin aditivos artificiales. Las llamadas clean labels están creciendo a nivel global, y las alacenas familiares empiezan a llenarse de productos más naturales.
En este escenario, los snacks nutritivos (como granolas, pochoclos saborizados caseros o barritas hechas en casa) se consolidan como alternativas prácticas y saludables. También influye el crecimiento de las dietas vegetarianas y veganas, que ya representan un porcentaje significativo de consumidores en Argentina y estimulan el desarrollo de opciones inclusivas para todas las edades.
También podría interesarte

Snacks para los más chiquitos: opciones para sumar a la rutina de forma rica y sana
A la hora de elegir snacks saludables para chicos y grandes, la clave está en la variedad, la simpleza y los ingredientes reconocibles. Estas son algunas propuestas:
- Pinchos caprese: queso (o su versión vegetal), tomate y aceituna en pequeños formatos que facilitan el consumo.
- Barritas caseras de granola: sin conservantes ni aditivos, fáciles de preparar y perfectas para llevar.
- Snacks a base de plantas: granolas o pochoclos saborizados hechos con ingredientes reales y sin ultraprocesamiento.
- Palitos helados caseros: elaborados con frutos rojos congelados, banana o mix de frutas naturales. Refrescantes y sin azúcar agregada.
- Bocaditos de pasta de maní y chocolate amargo: una alternativa energética, ideal para tardes de juegos.

Gracias a la creciente disponibilidad de opciones naturales, es posible encontrar propuestas que combinen ambas necesidades y transformen la merienda o el tentempié en un momento compartido, nutritivo y sin culpas.



















