No solo en jugo ni por la tarde: cómo y en qué momento consumir pomelo para potenciar la salud
Te contamos cuáles son las mejores formas de incorporar el pomelo a tu dieta y aprovechar todos sus beneficios para el cuerpo y la salud.

El pomelo, esa fruta cítrica refrescante, ganó popularidad en los últimos años dentro de diferentes dietas y planes de alimentación. Además de sus beneficios nutricionales, su sabor único, su precio accesible y la versatilidad en la cocina lo convirtieron en un favorito para muchos.
En términos generales, el pomelo es bajo en calorías (entre 30 y 50 calorías por cada 100 gramos), altamente hidratante (casi el 90% de su composición es agua), rico en fibra y una excelente fuente de vitamina C y antioxidantes.
Comparado con otras frutas cítricas, como la naranja o la mandarina, aporta menos calorías, lo que lo convierte en un aliado ideal para quienes buscan bajar de peso.

Beneficios de consumir pomelo en ayunas
Existen tres variedades de pomelo: blanco, rosado y rojo. Aunque presentan pequeñas diferencias nutricionales, todas ofrecen beneficios similares para la salud. Las versiones rosada y roja destacan por su contenido de licopeno, un antioxidante adicional, mientras que el pomelo blanco suele ser más ácido y menos dulce.
También podría interesarte
Consumir pomelo en ayunas puede aportar múltiples ventajas:
- Mejora la digestión: gracias a su alto contenido de fibra, ayuda a estimular el tránsito intestinal y prevenir el estreñimiento.
- Favorece la pérdida de peso: su combinación de pocas calorías y fibra ayuda a generar sensación de saciedad y puede contribuir a reducir la ingesta de alimentos durante el día. Además, algunos estudios sugieren que el pomelo podría acelerar el metabolismo.
- Refuerza el sistema inmunológico: rico en vitamina C, fortalece las defensas y ayuda a combatir resfriados e infecciones.
- Regula los niveles de azúcar: algunos estudios indican que puede ayudar a reducir la insulina y favorecer el equilibrio de la glucosa en sangre.
- Hidratación: su alto contenido de agua contribuye a mantener el cuerpo hidratado, especialmente después de la noche.
- Propiedades antioxidantes: los antioxidantes presentes, como la vitamina C y los flavonoides, protegen las células del daño ocasionado por los radicales libres.
- Salud cardiovascular: gracias a la fibra y al potasio, puede colaborar en la reducción del colesterol y mejorar la salud del corazón.
- Fortaleza ósea: la vitamina C ayuda a absorber el calcio, fortaleciendo los huesos y reduciendo riesgos de osteoporosis, según detalla Mercado de Ibiza.

¿Fruta entera o jugo?
Para aprovechar al máximo sus nutrientes, comer el pomelo entero es más recomendable que hacerlo en jugo. La fruta completa aporta mayor cantidad de fibra, lo que favorece la digestión, la saciedad y regula el azúcar en sangre. Además, al comerla entera se conservan antioxidantes y fitoquímicos que podrían perderse al exprimirla.
Por otro lado, el jugo de pomelo es una forma rápida de hidratarse y consumir líquidos, aunque con menos fibra.

Por eso, consumir pomelo entero por la mañana en ayunas es una excelente manera de empezar el día lleno de beneficios, frescura y energía para potenciar la salud.



















