Desafío “Julio sin plástico”: los mitos y verdades que hay que saber para sumarse al reto

La generación de plásticos es uno de los mayores problemas globales, pero ¿prohibirlo es la solución?
España prohibe venta de frutas y verduras en envases plásticos
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Hoy se consume más plástico que en toda la historia de este material. Su producción se disparó desde 1950, y las proyecciones indican que se fabricarán 800 millones de toneladas anuales para 2050. Sin embargo, la tasa global de recuperación y reciclado de estos materiales no alcanza al 10%. Cada año se vierten al océano 11 millones de toneladas de plásticos, que hoy representan un 85% del total de desechos en el mar, según datos del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, PNUMA.El 62% de la producción de plásticos se destina a packaging y artículos de un solo uso, como utensilios descartables o sorbetes.

Plasticósfera, un documental sobre la contaminación de plásticos y microplásticos. Foto: Sergio Izquierdo
Plasticósfera, un documental sobre la contaminación de plásticos y microplásticos. Foto: Sergio Izquierdo

Una vez finalizada su vida útil, el plástico permanece por más de 500 años contaminando el suelo, el agua y el aire, ya que al degradarse produce micropartículas que son ingeridas por plantas, animales y seres humanos.

Por otro lado, según un estudio de la Universidad de Newcastle, cada persona consume por semana 5 gramos de plástico (el equivalente a una tarjeta de débito), cuyas consecuencias en la salud (mayor riesgo de cáncer, problemas hormonales y endócrinos) están siendo estudiadas.

Por estos motivos, un grupo de activistas inició en 2011 en Australia la campaña #JulioSinPlástico, que en Argentina es impulsada por Unplastify. La iniciativa propone, durante 21 días (el tiempo necesario para cambiar un hábito, según los psicólogos), abandonar un plástico cotidiano, con el fin de ir reduciendo el uso de este material.

Basura plástica - sorbetes
Basura plástica - sorbetes

No obstante, antes de aceptar este desafío, conviene tener en claro algunos mitos y verdades de este material tan utilizado en la industria y la vida cotidiana

Mito 1: el reciclado es la solución para la contaminación plástica

Realidad: hoy solo se recicla en promedio el 9% de todos los plásticos que se generan en el mundo. El reciclado no es la mejor, sino la última alternativa en la cadena de la economía circular, cuya primera opción es siempre evitar o reducir su uso.

Mito 2: las bolsas plásticas no son reciclables

Realidad: son de polietileno, material 100% reciclable y pueden transformarse en nuevos productos, como otras bolsas, caños, mobiliario, baldes etc. Pero para ser efectivamente recicladas, se necesita una correcta separación en origen (desecharlas limpias y secas en un contenedor para reciclables).

Bolsas de plástico - África
Bolsas de plástico - África

Mito 3: no se recicla más porque la gente no separa los residuos

Realidad: si bien esto en parte es cierto, el verdadero motivo es una cuestión de costos. Al estar subsidiada la producción de plásticos de origen fósil, resulta más económico fabricar plástico nuevo que recuperar y reciclar los plásticos usados, ya que los costos socioambientales de hacerlo (extractivismo, contaminación) están externalizados.

En cambio, si se internalizan los costos (cobrando un impuesto o tasa a la producción de plástico nuevo, o regulando el precio mínimo del plástico usado que la industria paga a los recuperadores), reciclar sería más económico que fabricar material virgen.

Mito 4: las bolsas biodegradables son más ecológicas que las bolsas plásticas comunes

Realidad: si bien las bolsas biodegradables se descomponen más rápidamente que las convencionales (en ciertas condiciones de humedad, luz o cantidad de oxígeno), generan microplásticos y no evitan la contaminación. Por lo tanto, evitar usarlas y llevar la propia bolsa reutilizable para las compras sigue siendo la mejor opción.

Día Mundial Libre de Bolsas de Plástico
Día Mundial Libre de Bolsas de Plástico

Mito 5: la solución es prohibir el plástico

Realidad: el plástico es irremplazable o la mejor opción en muchos casos. Por ejemplo, en la industria automotriz y electrónica, reemplaza a metales pesados o complejos de extraer mediante minería, y además es más liviano, lo que reduce la huella de carbono en su transporte. El problema no es el material sino el uso que hacemos de él, y la mejor opción no es prohibirlo sino informar y educar a las personas sobre su uso responsable.

Mito 6: no hay leyes sobre el reciclado

Realidad: si bien en Argentina no hay una ley nacional de Envases o de Responsabilidad Extendida del Productor, existen más de cien normativas a nivel municipal sobre gestión de residuos y reciclado, según Datos de la compañía B Unplastify, que se dedica a asesorar a empresas en su desplastificación.

El problema, más que la falta de leyes, es la falta de cumplimiento y controles.