Las tutucas de la infancia: la receta fácil y sencilla para disfrutarlas en casa mirando una película

Con un simple paso a paso e ingredientes fáciles de conseguir, podés hacer y disfrutar de las históricas tutucas en familia.

Las tutucas son el alimento favorito de casi todos los niños en edad escolar, ya que se pueden conseguir en los kioscos y almacenes del barrio y se pueden disfrutar en cualquier momento del día. Ahora, con pocos ingredientes y un sencillo paso a paso, se pueden realizar en el hogar. Una opción más sana y accesible.

A diferencia del pochoclo, las tutucas se realizan con maíz blanco que, en medio de su cocción, se transforman y adquieren textura aireada y crocante.

Ingredientes para las tutucas caseras

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  • 1 taza de maíz blanco partido o maíz para hervir (no pisingallo)
  • Agua para hervir
  • 1 taza de azúcar
  • 3 cucharadas de agua
  • 1 cucharada de aceite neutro
  • Una pizca de sal, opcional
  • Las tutucas se diferencian de los pochoclos. Foto: Pixabay.

    Paso a paso para realizar las tutucas

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  • Primero se debe hervir el maíz en agua hasta que los granos estén tiernos sin que lleguen al punto de desarmarse. Luego escurrir y dejar secar por completo (se pueden dejar envueltos en un repasador durante unas horas o secarlos en horno a temperatura baja).
  • Luego se debe calentar una sartén grande o una olla con base gruesa y, sin agregar grasa, colocar una capa de maíz seco. Tapar y cocinar a fuego fuerte, moviendo por momentos, hasta que los granos comiencen a inflarse (no explotan como los pochoclos). Retirar y reservar.
  • En otra olla se debe preparar el camelo colocando azúcar, las cucharadas del agua y el aceite. Cocinar a fuego medio hasta que el azúcar se disuelva y tome un color dorado claro. Solo mover la olla, no revolver con cuchara.
  • Después se debe incorporar las tutucas infladas al caramelo y mezclar con cuchara de madera hasta que se cubran todos los granos. También se puede añadir una pizca de sal para realzar el sabor.
  • Por último, se debe dejar enfriar y volcar sobre una bandeja aceitada o en papel manteca, y disfrutar.