Es tendencia: cómo aplicar la regla de moda para vestirse en invierno con toda la onda y no pasar frío

Los primeros días de frío ya se hicieron presentes en Argentina, y las temperaturas bajo cero trajeron una ola polar extrema. Por eso, el abrigo se volvió la prenda indiscutible durante esos días, aunque a veces combinar todas las capas que usamos puede resultar difícil. Sin embargo, hay una regla de moda que llega para salvar la vida de muchos.
El sándwich dressing es la técnica que permite convertir los looks combinando todo: colores, texturas y todo tipo de proporciones. Esta tendencia fue implementada por estilistas y celebridades y es un buen truco para no dar mil vueltas al placard. En esta nueva moda no hay reglas, vale todo.

Cómo llevar la técnica Sandwich dressing
Ya como spoilea su nombre, se trata de ir sumando prendas como si fueras un sándwich. Como resultado, tendrás un outfit en capas, ideal para días de mucho frío. En primar lugar, hay que elegir un tono protagonista o género de base.
Luego, se debe agregar un tono que haga contraste que puede estar en la falda, la camisa o el pantalón y, por último, hacer un ajuste de medidas, por ejemplo, quienes completen el look con un tapado oversize deben elegir una remera al cuerpo o viceversa.

Por su parte, Sarah Jessica Parker, una de las impulsoras de esta tendencia, ya lució esta técnica. En las imágenes que se filtraron de la serie And Just like That se puede ver a la actriz siguiendo esta regla. A continuación, los tips a tener en cuenta:
- Color y accesorios a tono: se deben combinar lo mismo tanto arriba como abajo, por ejemplo una camisa, unos zapatos y una cartera, y luego se debe elegir un centro en contraste, que puede ser una falda, un saco o un vestido.
- Texturas protagonistas: un tapado grueso con botas grandes, vestido liviano o falda mini genera contraste táctil y visual.
- Prendas equilibradas: tapado oversize arriba, botas chunky abajo y un vestido ajustado en el medio para ayudar a favorecer la figura.
- Accesorios en primera plana: un cinturón, bufanda, pañuelo o cartera pueden reemplazar a las prendas centrales y romper con la monotonía.